Durante la adolescencia se pueden evidenciar tanto conductas solidarias y empáticas, como conductas discriminatorias, excluyentes o violentas hacia los demás. El que prime un tipo de comportamiento más que otro depende en gran medida de las oportunidades previas que hayan tenido los adolescentes de desarrollar las competencias requeridas para convivir en comunidad. Si deseas promover relaciones solidarias y empáticas en mujeres y hombres adolescentes te invito a leer el post que he preparado para ti. Fuente foto: Freepik.com
“Nadie, nunca me dijo que hacer eso era malo, yo pensaba que era un chiste” Joven privado de la libertad recordando su infancia. “Cuando era niño obligaba a la empleada del servicio doméstico a decirme “Si, mi amo” cada vez que le pedía un favor. Mi familia se reía de la situación. Un día me dio por tirarle toda la ropa a la calle y nadie me regañó, le tocó a ella bajar a recogerla”
¿Cómo promueves la empatía en la población adolescente bajo tu cuidado?
Hacia los 12 años de edad, la mayor parte de jóvenes está en capacidad de expresar opiniones más flexibles hacia el comportamiento de las personas, en comparación con lo que pensaba entre los 7 y los 10 años de edad, siempre y cuando cuente con frecuentes oportunidades para compartir con personas de diversas condiciones, analizar las razones de su comportamiento y el de los demás, así como reflexionar sobre las posibles consecuencias de sus propias acciones.
Si deseas promover la empatía en mujeres y hombres adolescentes bajo tu cuidado puedes ofrecerles oportunidades para: a) ubicarse en el lugar de las personas que son diferentes a ellos a través de historias, juegos de roles o situaciones reales; b) invitarlos a lugares y actividades donde puedan compartir y escuchar a personas que tienen diferente edad, diferente sexo, diferente procedencia, diferente orientación sexual, diferente condición social o económica, diferente identidad, diferentes creencias políticas, diferentes condiciones físicas o mentales; c) aprender a través de tu ejemplo, la importancia de escuchar tranquilamente los argumentos de otras personas, aunque tú no estés de acuerdo con ellas para poder entender mejor diversos puntos de vista. Y lo más importante, mostrarles con tu ejemplo, que puedes escucharlos atentamente, aunque no estés de acuerdo con ellos, preguntarles amablemente por qué consideran que sus opiniones son válidas, adecuadas o correctas antes de exponer las tuyas. De esta forma, les facilitarás aprender de otros puntos de vista, y entender por qué las personas piensan, sienten o actúan de manera distinta a ellos. Para saber más.
¿Deseas saber más? Te sugiero estar muy pendiente de nuestro próximo post. Si deseas información sobre algún tema en particular puedes escribirme a través de la sección Contáctame.