Hacia los siete años de edad el comportamiento de autoestimulación genital suele disminuir o por lo menos no suele ser reportado con frecuencia por los cuidadores. Posiblemente, esto sucede porque durante este periodo, tanto niñas como niños suelen pasar mayor cantidad de tiempo en contacto con otros niños de su edad y menos con sus padres, pero especialmente, porque están más conscientes de las expectativas sociales frente a los comportamientos que se consideran deben ser privados. Es poco frecuente que durante los siete y once años de edad se presenten conductas de autoestimulación genital en público a no ser que sea una conducta ampliamente extendida o aceptada en su contexto por los adultos o por sus pares.
Una madre no sabe qué hacer cuando su hijo menor le comenta que su hermano mayor en las noches se toca los genitales y hace ruidos raros.
¿Puedes hablar con niñas y niños acerca de la masturbación o le dejas esta tarea a sus amigos, a los medios de comunicación o a otras personas?
Hacia el final de este periodo algunas niñas y niños refieren conductas de masturbación, la cual incluye autoestimulación genital, pero a diferencia de aquella que se presenta en niños de menor edad, la masturbación suele incluir fantasías eróticas y realizarse en privado. Aunque los comportamientos considerados públicos o privados, varían de un contexto a otro, incluso de una familia a otra, establecer estas diferencias y ser capaz de autorregular su comportamiento según dichas diferencias son características del desarrollo sexual de niñas y niños entre los siete y los once años de edad.
Si has compartido con niñas y niños algunos de los aspectos que hemos mencionado en post anteriores, tales como llamar a los genitales por sus nombres correctos, mencionar la importancia de conocer el cuerpo para promover su valoración y autocuidado, e informarse sobre la sexualidad teniendo en cuenta el conocimiento científico disponible, tanto niñas como niños asumirán la masturbación como una actividad exploratoria y placentera más, que el cuerpo ofrece, y la cual puede resultar agradable para la mayoría de las personas, aunque, igual que sucede con otras actividades, a algunas personas puede no agradarles.
Es importante tener en cuenta que a medida que crecen tanto niñas como niños requieren contar con mayor privacidad, la cual no siempre es posible, ya sea por falta de espacio o por la violación permanente de otros a su intimidad.
Algunos aspectos que los cuidadores de niñas y niños entre siete y once años de edad pueden tener en cuenta al educar sobre la masturbación son los siguientes: enfatizar en la importancia de la autoexploración del cuerpo como una oportunidad de autoconocimiento; comunicar claramente los comportamientos que se consideran deben realizarse en privado; facilitar espacios de privacidad acordes al desarrollo de niñas y niños; explicar la importancia de valorar y respetar la intimidad y la vida privada de todas las personas; ofrecer oportunidades para que niñas y niños aprendan a expresar su desagrado o busquen apoyo cuando otras personas vulneran su intimidad.
¿Deseas saber más? Te sugiero estar muy pendiente de nuestro próximo post. Si deseas información sobre algún tema en particular puedes escribirme a través de la sección Contáctame.